“Soy Policía y soy lesbiana”, afirmó enfáticamente la Teniente Coronel de la Policía Metropolitana de Bogotá, Sandra Mora, durante su intervención como ponente del Foro Transforma “10 años de la Política Pública LGBT”, evento organizado por Participación Bogotá – IDPAC, en articulación con la Dirección de Diversidad Sexual de la Secretaría Distrital de Planeación. 

“Esta conmemoración de los diez años de la Política Pública representa la libertad.  Hombres y mujeres somos libres de elegir lo que queremos ser. Y no solo hablo de orientación sexual; el reconocimiento de la diversidad también es para la persona que piensa diferente”, fue la reflexión de la Teniente Coronel, quien con otros ponentes invitados compartió experiencias de lucha y reivindicación de derechos de las personas LGBT.

En ese camino de construcción de la Política Pública, los activistas que la propusieron se encontraron con circunstancias que les fueron adversas. “Esta Política ha sido muy compleja pues empezó a abrirse campo en un país de difícil tolerancia con la diversidad. El diálogo horizontal y el activismo, desde las instituciones, la hizo posible”, expresó Nikita Simonne Dupuis-Vargas, activista en temas de transmasculinidad.

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Aunque el inicio no fue fácil, su implementación trajo consigo ventajas para quienes encontraban tropiezos en la manifestación de sus propias identidades. “Debo decir que me beneficié de esta Política Pública. Que en Bogotá y en Colombia se empezara a hablar de temas de transexualidad, me permitió dar el primer paso a mi tránsito de género.  Entendí que mi caso no era el único y que debía arriesgarme porque, en adelante, estaría protegido”, manifestó Simón Uribe Brant, activista en temas transgénero.

 “La Curramba”, Álvaro Miguel Rivera, “La Shona”, Sergio Urrego, entre otros activistas y ciudadanos muertos por discriminación, enfermedad o en la causa de la lucha por sus derechos, recibieron un homenaje póstumo en reconocimiento de años de persistencia en la meta de garantizar el reconocimiento a la comunidad LGBT en el Distrito.

Al término del evento, una conclusión que define los logros pero también los retos que aún hay que asumir para hacer de Bogotá una ciudad ejemplo de inclusión en medio de la diversidad: “Son 10 años de avances que han permitido el reconocimiento de los derechos de un sector poblacional que ha venido luchando por visibilizarse, pero el trabajo debe continuar y debe ser un trabajo en equipo que reúna a organizaciones sociales, academia e instituciones. El sueño es que podamos decir ‘vive la diversidad y termina la discriminación’ desde el corazón y con acciones”, dijo Antonio Hernández Llamas, director del IDPAC.